Sí podemos protegerlos
Resulta para todos los sandinenses mantener y cuidar una de las especies mas prehistóricas del planeta tierra: las tortugas marinas.
Resulta para todos los sandinenses mantener y cuidar una de las especies mas prehistóricas del planeta tierra: las tortugas marinas. No nos podemos cansar porque en esta misión estamos todos involucrados de una manera o de otra.
Tal es así que científicos y lugareños, emprenden cada año por esta época, un programa multisectorial en playas de la Península de Guanahacabibes, para proteger el desove de las tortugas marinas y así evitar la extinción de esos amenazados animales.
Créanme cuando les digo que esta no es una cuestión de hace unos días ni un mes ni un año sino desde 1992. Fue entonces que este proyecto entro en vigor. De ahí entonces la activación de campañas de educación ambiental en escuelas y vecindades, junto al entrenamiento de guardabosques en el monitoreo del quelonio.
Como ya es tradicional, los jóvenes conservacionistas de la Facultad de Biología de la Universidad de La Habana investigarán a partir del mes de mayo sobre el estado de las poblaciones y especies de tortugas en las 20 playas de Gunahacabibes, hasta finales de agosto, en grupos que se rotarán cada 15 días, hasta esa fecha. Y por su puesto a sus trabajos sumarán el contacto con los pobladores para capacitarlos sobre la conservación de especies como la tortuga verde, la caguama y el carey, cuyos pequeños críos pueden correr numerosos peligros, por el asedio de depredadores.
De todo lo antes dicho hay que resaltar algo importante y son las acciones que ante este hecho se llevan a cabo en Sandino. No pueden faltar las constantes visitas al litoral con estudiantes de preuniversitarios y escolares del nivel primario, estos últimos procedentes de centros situados dentro de la reserva de la biosfera, a fin de devolver al mar a las tortuguitas recién nacidas.
Es una realidad que esta operación de rescate, iniciada hace poco más de una década, se propone poner a salvo varias especies de tortugas acosadas implacablemente por depredadores animales y humanos, que en algunos casos amenazan con la desaparición de estos quelonios, es por ello que debemos mantener nuestra compostura y hacerle frente a estas acciones negativas que se dan a veces en esta temporada.
Desesperarnos nunca. Se sabe que las tortugas se aparean en el océano y luego las hembras avanzan hacia playas seleccionadas donde escarban un hueco en la arena y colocan allí hasta un centenar de huevos y como he dicho en disímiles ocasiones nuestras playas son idóneas para que ellas realicen esta actividad.
No podemos perder de vista que este animal está en período de extinción por tanto se tiene mucho cuidado en su preservación. Y como expresaba al inicio intervienen en esta noble tarea muchas personas las que agradecen a la naturaleza la belleza del paisaje en el que se desempeñan por contribuir a conocer más acerca de estos curiosos animales, así que demostremos que sí podemos protegerlos.
Apuestan por el cuidado y conservación de importante especie del mar en Sandino