Soberanía alimentaria, más que un reto, un deber
Son muchos los elementos a tener en cuenta cuando se habla de la Ley de Soberanía Alimentaria y Seguridad Alimentaria Nutricional (SSAN).
En Cuba, va más allá de producir alimentos. El instrumento jurídico concibe la alimentación desde las necesidades nutricionales del pueblo, sus hábitos de consumo, hasta la planeación estratégica de producción.
Por tanto, resulta vital la educación de todos los implicados. Por ese camino anda el municipio Sandino en Pinar del Río al evaluar con profundidad el plan SSAN con los representantes de los distintos programas y demás actores involucrados para lograr la sostenibilidad alimentaria.
Todo parte de un plan general con la colaboración fundamental de cada programa en respaldo al llamado de la máxima dirección del país ante el complejo escenario económico en que se encuentra.
Su aprobación se hará por el Consejo de la Administración y previo a ello será dado a conocer a los delegados del Poder Popular en la Asamblea municipal del próximo día 28 de mayo.
El plan SSAN es una cuestión estratégica y mancomunada de instituciones estatales con un papel rector el Sistema de la Agricultura. Metas y propósitos con acciones medibles por cooperativas, productores, responsables y con la clara concepción de aprovechar el presente como oportunidad para entender mejor la necesidad de prepararse para asumir con responsabilidad la tarea, en una etapa fogueada en retos y adversidades.