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Desde Pinar del Río, alternativas para incrementar las exportaciones

La necesidad de incrementar las exportaciones como vía de generar ingresos para el desarrollo productivo es una urgencia del país hoy ante el panorama económico actual, caracterizado por el recrudecimiento del bloqueo contra la Mayor de las Antillas.

Esa razón obliga a buscar alternativas que nos permitan avanzar, a pesar de las limitaciones con los portadores energéticos. Hay que diversificar las producciones y buscar mayores oportunidades en el mercado internacional, pues quedan reservas por explotar.

En este sentido, alentador es el camino que puede recorrer la provincia de Pinar del Río, territorio que apuesta por el rescate de aquellas producciones tradicionales que siempre otorgaron dividendos y reconocimiento, y la incorporación de nuevos fondos exportables con demanda hoy fuera de nuestras fronteras.

Fuentes consultadas aseguran que en Vueltabajo actualmente están identificados unos 45 productos con posibilidad de exportarse, provenientes en su mayoría de la agricultura, la pesca y la minería, fundamentalmente.

Pinar del Río fomenta y diversifica sus exportaciones

En ese sentido, sobresalen empresas como Cubaquivir, Agroindustrial Enrique Troncoso, Industrias Locales Varias, Agroindustrial de Granos Los Palacios y Pesquera Industrial La Coloma, por solo citar algunos ejemplos.

La provincia también destaca por las producciones de concentrado de plomo y de zinc, que se procesan en el proyecto Castellano, a cargo de la Empresa Minera del Caribe S.A. (Emincar), y que en 2018 exportó valores ascendentes a unos 117 millones de pesos.

El 2019, tiene que marcar el despegue de las exportaciones en la provincia. Mención merecen entidades como la Empresa de Industrias Locales Varias, la cual hoy fomenta y exporta más de una docena de productos y la Fábrica de Ron El Valle, única del país fuera del sistema de Cuba Ron, que envía fuera de fronteras sus producciones.

En este sentido, una noticia realmente alentadora resulta la reinserción de la emblemática Fábrica La Conchita en el mercado internacional, con la comercialización de la demandada crema de guayaba, una de sus líneas estrellas.

No obstante es preciso sumar nuevos productos para la exportación, asimilar experiencias positivas implementadas en otros territorios, y lograr que las empresas asuman un papel más activo en la gestión de su propio desarrollo.

Profundizar en cada municipio y aprovechar al máximo el vínculo con las universidades para crear estrategias de desarrollo local que incluyan proyectos de exportación, pudiera ser un camino para que la gente sienta que es protagonista en esta historia, porque de ello dependen los dividendos que necesita el país para impulsar la economía.

Como ha insistido el Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, el desafío está en allanar el camino para que sus resultados se aprecien más temprano que tarde, con menos trabas y limitaciones, y que cada obrero sienta que trabaja para un beneficio social, a la vez que mejora la economía familiar.

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