Comprender la homosexualidad fomenta el respeto
La existencia es la oportunidad constante de descubrir. El desafío de la diversidad sexual es aceptar, respetar y vivir con la diferencia.
La existencia es la oportunidad constante de descubrir. El desafío de la diversidad sexual es aceptar, respetar y vivir con la diferencia. Es un principio que se impone por lo actual del tema, el cual resulta complejo debido a que la aceptación de lo diferente siempre causa resistencia.
La decisión es individual, mucho más allá que cualquier actitud relacionada con la preferencia sexual. Los homosexuales son personas iguales que las otras con los mismos deberes y derechos en nuestra sociedad.
Sin embargo aún son muchos los prejuicios derivados de una cultura tradicionalmente machista alimentada de muy diversas maneras con el objetivo declarado de que impere el criterio y la forma de hacer de los hombres en detrimento de las mujeres, y de quienes no se atengan a los patrones definidos. La pregunta queda en el aire: ¿Debemos valorar a las personas por sus preferencias sexuales o por su comportamiento social?
«…por supuesto que no, la sexualidad o las preferencias sexuales son decisiones propias de cada ser humano y deben ser respetadas y vistas como algo normal…», dijo un joven adolesente.
« …Hay que entender y aceptar a todas la spersonas por igual , más allá de sus preferencias sexuales, se trata únicamente de ser sincero con uno mismo, es únicamente respetar a tu vecino, es algo que todo el mundo tiene que aprender… », aseguró un profesional de la Educación en el municipio.
«…Desgraciadamente aquí no se respeta todo. Para mí lo primero es el respeto a sí mismo y a los demás, a partir de allí, no habría ningún problema de ninguna causa, ni con homosexuales, ni con mujeres, ni con gente que piensa diferentemente de forma religiosa, ni de racismo, ni con problemas un poco relacionados… », manifestó, un miembro del Proyecto de prevención de SIDA en Hombres que tienen sexo con otros Hombres y también, promotor de salud aquí.
Preocupaciones, apoyo, criterios encontrados, todo eso y mucho más rodea el caso de los homosexuales en la sociedad de estos tiempos, y no es posible ignorar tal situación que de una manera u otra atenta contra sus posibilidades de desarrollo y limita sus derechos como ciudadanos.
De seguro usted conoce homosexuales dignos, trabajadores, serios, cumplidores de cualquier tarea que se les asigna y que disfrutan de reconocimiento, prestigio y autoridad en el barrio y en sus centros laborales, eso es muestra de que su condición sexual no está reñida con los objetivos sociales.
Aceptar como correctas las relaciones homosexuales está por completo a tono con las mejores cualidades humanas y debemos acostumbrarnos a lograr esto con entera normalidad, a fin de cuentas se trata de una cuestión de simple elección que debe ser respetada como cualquier otra.
No se debe olvidar que la mejor manera de ser aceptado verdaderamente, se logra cuando se es uno mismo, pues quien vive de apariencias solo en apariencias será feliz.