Tabacalero pinareño combina los secretos de sus antecesores
A Tomás Vega la felicidad le sale por los poros, porque recién acaba de recoger la cosecha de tabaco de su vega en San Luis, Pinar del Río
A Tomás Vega la felicidad le sale por los poros, porque recién acaba de recoger la cosecha de tabaco de su vega de la zona de La Mulata, en San Luis, y la lozanía, tamaño y buen secado de las hojas resguardadas en su amplia casa de cura natural, le permiten disfrutar anticipadamente del éxito de la campaña, con augurios de elevados rendimientos y calidad.
En varias oportunidades ha sido seleccionado cosechero más destacado de ese municipio pinareño, identificado por la cuna del tabaco en Cuba, dice que el buen resultado no es solo suyo y de la familia, porque hoy el campesino combina los «secretos de sus antecesores» en el cultivo, con los adelantos científicos y la capacitación que reciben para su introducción.
La garantía de materia orgánica, humus de lombriz y otros beneficiadores de los suelos, y la oportuna llegada de los recursos, unido a la buena atención a las plantaciones y la calidad de nuevas variedades creadas en la estación experimental del tabaco de San Juan y Martínez, facilitan la labor del labriego, aseguró.
Rememorando el pasado
Su mirada se pierde por la amplia extensión de su finca y el rostro se le ensombrece cuando piensa en los trabajos padecidos por su padre y por él, siempre acompañándolo en las faenas, aun siendo un »vejigo».
Y es que pienso que todos los guajiros de pura cepa como yo, somos de los agradecidos, porque Fidel nos dignificó y benefició cuando se firmó la Ley de Reforma Agraria y nos hizo verdaderos dueños de la tierra, antes éramos solamente seres humillados y explotados, señala.
Nuestra casa entonces tenía más rendijas que tablas y pencas de guano, las cuales le servían de techo. Y la comida?… un «puñaito» de arroz en una cazuela llena de leche para que creciera y alcanzara para todos’.
De nuestro sudor y el de otros productores ensanchaba sus bolsillos Miguel Saludes, un explotador sin escrúpulos de quien guardo funestos recuerdos, como aquella oportunidad en que prometió dar un adelanto para pagar la operación de apendicitis de la abuela y una vez hecha la cirugía, dijo que no podía dar el dinero en esos momentos, ilustró.
Sin embargo, tenía en sus almacenes dos cosechas nuestras sin liquidar y nosotros tuvimos que vender nuestra yunta de bueyes para salir del apuro; todo eso sufrimos, y me hubiera gustado que a mi viejo la vida le hubiera alcanzado para apreciar la cambiante realidad de ahora y ver la linda casa en que vivimos hoy.
Defenderemos nuestras conquistas
Por eso, yo no creo ni en título tres, ni en ninguno de la Helms-Burton. El que venga aquí en busca de algo, no va a coger nada, porque con uñas, dientes, piedras, con lo que sea, defenderemos lo nuestro, las conquistas de la Revolución, sentenció.
En su discurrir Vega se preguntó: ¿Qué se piensan los americanos, acaso se creen dioses del olimpo para trazar destinos o es que al inquilino de La Casa Blanca tanta prepotencia no le deja ver que los cubanos no comemos miedo?.
Debe tener muchos »tornillos» desajustados en su cerebro, para pensar que los campesinos cubanos van a someterse al imperio, pues los nacidos en esta Isla, nunca retrocederemos al pasado y nuestro único compromiso es con la Revolución y la constitución doblemente nuestra, porque todos ayudamos a conformarla con nuestras sugerencias y criterios, recalcó.
Tanto que pregona sobre la democracia el presidente de Estados Unidos, pero desconoce su propio significado. Esa ley viola hasta las propias leyes estadounidenses, según veo, y va a perjudicar más a ellos que a nosotros, porque los países cuyos intereses están siendo amenazados, le han puesto oídos sordos.
Y así se hace caray, que se vaya … a disponer y poner leyes a su casa, digo, si es que lo dejan…