La cooperación internacionalista de Cuba cuenta con más de 2 300 colaboradores, organizados en 26 brigadas médicas del Contingente Henry Reeve
Al intervenir en la 73a. Asamblea Mundial de la Salud, efectuada este lunes de forma virtual, el ministro cubano del ramo, doctor José Ángel Portal Miranda, aseguró que la vocación solidaria de la Isla, materializada en la ayuda que ofrece a varios países del mundo para combatir a la covid-19, no ha descuidado «en ningún momento la responsabilidad de proteger a nuestro pueblo».
Explicó que, al diagnosticarse los primeros casos el 11 de marzo, ya se aplicaban las medidas del Plan Nacional elaborado en consonancia con los protocolos y buenas prácticas de la Organización Mundial de la Salud.
El seguimiento diario, especificó, ha permitido reforzar la vigilancia epidemiológica, garantizar el diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno de la enfermedad.
A la par del cuidado riguroso de la nación, Portal Miranda exaltó la cooperación internacionalista de «más de 2 300 colaboradores, organizados en 26 brigadas médicas del Contingente Henry Reeve», presentes en 24 países, a los cuales «se suman los más de 28 000 profesionales de la Salud que ya se encontraban en 59 naciones».
Aseveró que este gesto solidario no han podido impedirlo ni el genocida bloqueo impuesto por el Gobierno de los Estados Unidos contra la Isla, cruelmente recrudecido, ni los intentos de la administración de esa potencia para desacreditar y obstaculizar la cooperación médica cubana.
Destacó que Cuba posee un escenario favorable en el enfrentamiento a la pandemia, por contar con un sistema de salud gratuito y resiliente, con un indicador de nueve médicos por cada mil habitantes, que permite cubrir el 100 % de la población, y también una industria médico-farmacéutica y biotecnológica con productos novedosos para el tratamiento de la afección, como el Interferón alfa 2b, los anticuerpos monoclonales, el péptido cigb-258 y el Surfacén.