Respetar el derecho de los demás es una muestra de disciplina, responsabilidad y solidaridad, violarlos es todo lo contrario y mucho más… y pone en peligro la tranquilidad ciudadana y el bienestar social.
La cuestión de los derechos de las personas forma parte de la legislación oficial en todos los confines del planeta y ellas de una manera u otra norman el disfrute de los mismos y sus respetos por parte de los demás.
Cuestiones tan complejas como el respeto a la igualdad entre los sexos y las razas la posibilidad de acceder a la salud la educación y el trabajo así como la expresión de la sexualidad son objeto de profundos análisis en eventos nacionales e internacionales y se adoptan medidas con el objetivo de asegurar que no se vulneren.
Cuba bajo el influjo de la obra social de la Revolución alcanza resultados notorios en esta esfera a pesar de las constantes acusaciones de nuestros enemigos y no hay dudas de que el respeto a la vida como derecho fundamental es la expresión de mayor alcance y significación.
Constitución de la República de Cuba
La Constitución de la República de Cuba aprobada en el año 2019 por votación popular establece en su articulado y específicamente en el título derechos, deberes y garantías, el compromiso del estado con esta cuestión y deja claro que la dignidad humana es el valor supremo que sustenta el reconocimiento y ejercicio de los derechos y deberes consagrados en la Constitución, los tratados y las leyes y que en correspondencia con ello reconoce y garantiza a las personas el goce y ejercicio irrenunciable, imprescriptible, indivisible, universal e independiente de los derechos humanos en correspondencia con los principios de progresividad, igualdad y no discriminación y su respeto y garantía es de obligatorio cumplimiento.
Estos elementos constituyen el sustento de un quehacer que se evidencia y materialice en las leyes que instrumentan la Constitución y a cuyo cumplimiento se da seguimiento a través de las vías establecidas; quiero llamar la atención no obstante a que en el plano práctico se evidencian debilidades en relación con el comportamiento de las personas en materia de respeto al derecho de los demás y en tal sentido vale la pena destacar que como dijera nuestro héroe nacional José Martí: deberes y derechos deben ir juntos.
Respeto al derecho de los demás
A qué nos referimos muy sencillo se trata de que no es posible llevar el disfrute de nuestros derechos más allá del respeto del derecho de los demás algo que para muchos carece de importancia pero que a nuestra consideración es la base de las buenas relaciones entre las personas y también entre los pueblos como sentenció el benemérito de las Américas Don Benito Juárez García al decir que entre hombres como entre pueblos el respeto al derecho ajeno es la Paz. Por supuesto que usted conoce ejemplos sobrados de actitudes negativas relacionadas con este modo de actuar.
Les recuerdo por solicitar algunos ejemplos que escuchar música es un derecho que todos tenemos, pero si esa música perjudica a otros por estar a un alto volumen entonces es una violación, del derecho ajeno como lo es colarse en la cola, dañar las pertenencias de otros, quedarse con el vuelto al pagar y otras muchas acciones que apreciamos a diario.
Enfrentar esta situación y hacer valer nuestra inconformidad es un derecho que pocas veces ejercitamos, y eso solo conduce a que los violadores den cada vez más seguros de lo que hacen y eviten el peso de las medidas disciplinarias que corresponden en cada caso, razón más que suficiente para que la sociedad en su conjunto y cada individuo en particular exija lo que le corresponde.
Respetar el derecho de los demás es una muestra de disciplina responsabilidad y solidaridad, violarlos es todo lo contrario y mucho más… y pone en peligro la tranquilidad ciudadana y el bienestar social.
Colaboración : Luis Calderón Canals
