La premisa de trabajo en el país sigue estando marcada por el estricto cumplimiento de las medidas higiénico-sanitarias, esenciales para evitar nuevos brotes de la enfermedad en Cuba
Cuatrocientas cincuenta y dos personas positivas a la COVID-19 permanecían hospitalizadas este miércoles en Cuba, cifra que ha comenzado a disminuir en los últimos días y se confirma como la más baja desde que en el mes de septiembre se alcanzó el pico máximo de personas ingresadas a causa del nuevo brote de la epidemia.
Según confirmó el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, la mayoría de esos pacientes pertenecen a Sancti Spíritus, La Habana y Ciego de Ávila, tres de las provincias que diagnosticaron nuevos casos en esta jornada y, por tanto, centraron los análisis del grupo temporal de trabajo para la prevención y control del nuevo coronavirus, encabezado por el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el primer ministro, Manuel Marrero Cruz.
Al referirse a Sancti Spíritus, en fase de transmisión autóctona limitada, y que en la actualidad manifiesta el escenario epidemiológico más complejo del país, el titular de Salud Pública informó sobre el cierre del evento de transmisión local en la comunidad Bernal, del municipio de Jatibonico.
A su vez, dio a conocer la apertura de uno nuevo en el área de Salud Norte, del municipio cabecera de esa misma provincia, en el cual, aun cuando no reportaron casos positivos en la jornada, se acumulaban 11 pacientes confirmados. De las muestras PCR que allí se habían realizado –puntualizó– 151 han sido negativas y estaban pendientes los resultados de 31 personas. De esta manera, precisó Portal Miranda, en el país se mantienen activos 15 eventos de transmisión local, de los 92 que se han abierto desde el enfrentamiento a la epidemia en Cuba.
Puntualmente sobre Sancti Spíritus, donde se han diagnosticado 139 pacientes positivos a la enfermedad en las últimas dos semanas, periodo en el que la tasa de incidencia por cada 100 000 habitantes se incrementa a 29,83, la gobernadora Teresita Romero Rodríguez comentó que allí se profundiza en los estudios poblacionales de las áreas de mayor complejidad. En los días más recientes, aseguró, se ha incrementado el número de muestras PCR en la provincia, con el propósito de detectar la mayor cantidad de personas contagiadas y poder contener la transmisión de la enfermedad.
El gobernador de La Habana, Reinaldo García Zapata, reconoció que, si bien en la jornada la capital solo reportó un nuevo caso positivo en 4 211 muestras PCR procesadas, ello no constituye motivo para la confianza. Ahora es cuando menos confiados tenemos que estar, que cada cual cumpla lo que le corresponde para lograr contener los contagios, valoró.
En el territorio, dijo, se continúa el seguimiento a la situación que presentan los 53 controles de focos activos, en los cuales se trabaja con minuciosidad. Atención diferenciada se brinda a aquellos que tienen cinco o más casos positivos, de manera que ninguna situación nos tome por sorpresa, señaló.
Sobre este aspecto, el Ministro de Salud Pública subrayó que el balance en la capital sigue siendo positivo, pues durante las últimas jornadas son más los controles que cierran que los que inician. En esta ocasión se dieron por concluidos cinco, en igual número de municipios, y solo se abrió uno en Regla.
Al informar sobre la situación de Ciego de Ávila, provincia donde poco a poco se ha ido retomando el control de la epidemia, el gobernador Tomás Alexis Martín Venegas precisó que los tres casos informados el miércoles tenían fuente de infección conocida y se encontraban ingresados en centros de aislamiento para contactos.
Como un elemento esperanzador, refirió que en los últimos seis días solo se han confirmado nuevos pacientes en la ciudad capital, los otros nueve municipios se mantenían sin notificar casos. Durante la jornada se concedieron 23 altas clínicas y no había personas en estado grave ni crítico entre las 204 contagiadas que permanecían hospitalizadas.
En la sesión de trabajo, el grupo temporal también dio seguimiento a la recuperación en las provincias de Pinar del Río y Artemisa, así como en la Isla de la Juventud, tras el paso del huracán Delta por las inmediaciones de estos territorios.
Según dieron a conocer las respectivas autoridades gubernamentales, las afectaciones, de manera general, fueron mínimas y se concentran, fundamentalmente, en el servicio eléctrico y en la agricultura. El saldo de lluvias para las presas y embalses no ocasionó riesgos de inundaciones y ya regresan a sus hogares la mayoría de las personas evacuadas.
La premisa de trabajo en el país, tanto para el enfrentamiento a la COVID-19 como en la recuperación de las afectaciones provocadas por el evento climatológico, sigue estando marcada por el estricto cumplimiento de las medidas higiénico-sanitarias, esenciales para evitar nuevos brotes de la enfermedad en Cuba.