El contacto de nuestras manos en diferentes superficies dentro y fuera de casa puede derivar en la llegada de gérmenes al cuerpo. Por tal motivo la higiene debe de ser equilibrada y con especial cuidado en la piel, cabello, oídos, ojos, boca nariz, manos y uñas, pies y genital
Sandino-La higiene personal además de una experiencia de bienestar constituye hoy una imperiosa necesidad para la protección de la salud. En ello va el cuidado y aseo consciente de todo nuestro cuerpo, algo que es esencial para prevenir el desarrollo de infecciones, enfermedades y malos olores.
El contacto de nuestras manos en diferentes superficies dentro y fuera de casa puede derivar en la llegada de gérmenes al cuerpo. Por tal motivo la higiene debe de ser equilibrada y con especial cuidado en la piel, cabello, oídos, ojos, boca nariz, manos y uñas, pies y genital.
En nuestros niños es sustancial desde pequeños fomentar los hábitos de higiene personal. Entre ellos: lavarse los dientes tres veces al día, lavarse las manos antes de ingerir cualquier alimento y después de realizar alguna necesidad biológica en el baño y cuando regresamos de la calle.
En el caso de los hogares donde existe alguna mascota si jugamos con ella o la cargamos pues también hay que lavarse las manos, antes de ingerir cualquier alimento. Es preciso enseñarles a usar papel higiénico, explicarle por qué debe cambiar de ropa interior cada día y la importancia de bañarse diariamente.
Las prácticas de higiene personal ayudan a que te sientas bien con tu apariencia y se hará notar frente a las demás personas que te rodean por lo que de ello depende que tu presencia sea agradable o no, para tus compañeros.
En estos momentos frente al nuevo coronavirus la higiene personal juega un papel primordial, ya sea para las personas sanas o para las que contraen la enfermedad conocida como la COVID-19.
Cumplir las medidas
Si no te sientes bien, debes tomar medidas para evitar que los gérmenes se propaguen a otros. Esto incluye cubrirte la boca y la nariz haciendo uso correcto del nasobuco de manera permanente. Si queremos estornudar, debemos evitar que determinadas partículas caigan sobre otras personas cercanas o superficies a las que tienen acceso otros individuos que puedan contagiarse.
Hay que limpiar los espacios compartidos con antibacterianos y no compartir utensilios ni aparatos electrónicos. Además, desecha los pañuelos sucios inmediatamente y cumple con otras medidas orientadas como mantener el distanciamiento físico y si es preciso no salir de casa. Debes usar los pasos podálicos a la entrada del hogar y de cada centro laboral.
Soy del criterio de que a pesar de todo lo que se divulga acerca de la higiene personal ya sea en los medios, en las escuelas en centros laborales y en los hogares hay que seguir trabajando en las prácticas sistemáticas de buenos hábitos higiénicos, pues todavía nos encontramos personas que no tienen percepción del riesgo que puede ocasionar el no cumplir medidas higiénicas para la salud.
La pandemia así lo ha demostrado cuando personas en un mismo lugar cumpliendo las medidas higiénico-sanitarias no se contagian y otras que, con tan solo un desliz, un determinado incumplimiento del protocolo establecido en ese mismo lugar se ha contagiado con la enfermedad.
El llamado es a cuidar la higiene que es también protegernos frente a la COVID-19, cuidar nuestra salud y la de los demás. Como dice Manuel Calviño hacerlo vale la pena.
