Periodistas, soldados de las ideas
La prensa debe ser coqueta para seducir, catedrática para explicar, filósofa para mejorar.
Nada los detiene, su visión no encuentra fronteras y como austeros y altruistas persiguen la verdad en cada rincón a pesar de la distancia.
Hay quienes creen que su labor es una más, pero qué equivocados están. Día a día no hay reparos para el descanso, hombres y mujeres de actuar, en los que convergen inquietudes, pesares, sosiegos, alegrías, hechos propios del lugar donde permanecen.
Atrevidos, entusiastas, vislumbran el porvenir, su arma es la palabra y lo cotidiano el centro de su universo. Gracias a su constancia sabemos lo que se hace o queda por hacer, nos muestran el palpitar de comunidades, costumbres y tradiciones, la realidad en lo cotidiano de la vida.
Cuántos tropiezos, pero la razón les exige ser obstinados, perseverantes, indagar y encontrar el por qué. Reflejo de historias marcadas que enrutan caminos hacia el porvenir.
José Martí fue uno de ellos, su prosa de prisa mostró la importancia de la prensa en la batalla ideológica. Sus obras guiaron a hombres y mujeres a la libertad.
Fundó el periódico Patria, para muchos su obra maestra, el 14 de marzo de 1892, acontecimiento que se invoca cada año en sentido homenaje y que refuerza con total compromiso el papel de la prensa en el contexto actual. Un ejemplo de cuánto puede hacerse a través de las ideas, de historias contadas.
No importa lo difícil del momento, la tinta y el papel, han ayudado a enfrentar situaciones, a mejorar calidad de vida a lograr compromisos y cumplimiento de deberes sociales.
Viene a mi mente parafrasear al maestro cuando en su verbo claro, ardiente, apasionado y patriótico afirmó que «La prensa debe ser coqueta para seducir, catedrática para explicar, filósofa para mejorar, pilluelo para penetrar, guerrero para combatir. Debe ser útil, sana, elegante, oportuna, valiente. En cada artículo debe verse la mano enguantada que lo escribe y los labios sin manchas que lo dictan.»
No hay cetro mejor que un buen periódico. Aprender de su sapiencia ayuda a cultivar la unidad, a trabajar en el perfeccionamiento de la sociedad, a ser incansables periodistas, mejores soldados de las ideas.
Raisa Díaz Miranda