El amor, hace al recatado atrevido, al enfermo sano, al triste alegre, al inseguro seguro, al cautivo libre , al odiado amado.
Para escribir de él hay que sentar pautas al hablar. Navegar entre brisas y vaivenes .Sentir la nostalgia o melancolía cuando miras a la luna. Para hablar de él hay que corregir modelos y modales de actuación, enrutar el camino seguro hacia el futuro. Aprender a divagar entre sonrisas y tristezas, sensaciones y emociones.
Cuando quise ahondar en su antífona , profundizar en lo vernáculo de su significado me fue difícil encontrar las palabras seguras , porque el concepto de Amor encubre tantos sentimientos que muchos entrelazan sin embargo, otros pierden para aquejar con incertidumbres y penas.
Lo cierto es que levanta brioso y cautivador con la fuerza de un huracán. Perdura en el tiempo cuando lo acompaña el respeto y la admiración .Él no entiende de ambages ni miramientos. Impetuoso conquista el alma de hombres y mujeres sin importar condición.
El amor surca el viento como arpegio de guitarra y convida a enaltecer las grandezas de la vida, hace al recatado atrevido, al enfermo sano, al triste alegre, al inseguro seguro, al cautivo libre , al odiado amado.
El sentimiento moral más supremo, el que necesitan los pueblos para sobrevivir y ser libres .Hoy más que nunca el amor es necesidad imperiosa , esencia de la vida, ruta segura para el porvenir.
El amor el más universal de los sentimientos
Raisa Díaz Miranda