Este 15 de marzo los delegados al 8vo. Congreso del PCC, elegidos en las provincias de Granma, Ciego de Ávila y Mayabeque, comenzaron las sesiones de estudio de los documentos que regirán los debates del evento previsto entre los días 16 y 19 de abril
Con Baraguá en la memoria, alto símbolo de la intransigencia de los cubanos en el afán de hacer valer sus principios e imponerse a cualquier dificultad que, como nación, se deba enfrentar, este 15 de marzo los delegados al 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba, elegidos en las provincias de Granma, Ciego de Ávila y Mayabeque, comenzaron las sesiones de estudio de los documentos que regirán los debates del evento previsto entre los días 16 y 19 de abril.
En estas jornadas, los delegados examinarán los contenidos emergidos del proceso de balance de las organizaciones de base durante el año 2020, y de las consultas realizadas a los organismos de dirección provincial del Partido, así como a otras direcciones nacionales y organizaciones políticas y de masas.
«Estos documentos constituyen importantes instrumentos de trabajo que, además de brindarnos una actualización de todo lo que ha hecho el Partido desde su 7mo. Congreso hasta la fecha, nos permiten realizar nuestros aportes al perfeccionamiento de las propuestas recogidas para el venidero encuentro partidista», afirmó la delegada Alianna Corona Rodríguez, secretaria de núcleo en la Universidad de Granma, donde labora como profesora del departamento de Ingeniería Forestal. «Es sin dudas una antesala necesaria del Congreso», añadió.
Carlos Luis Garrido Pérez, primer secretario de la máxima instancia política en Ciego de Ávila, refirió a Granma que la vigencia de los documentos que evalúan los delegados se explica en la continuidad de los congresos 6to. y 7mo., en los cuales se marcaron pautas para el desarrollo económico y social del país, en medio de condiciones complejas y difíciles, y del recrudecimiento del bloqueo norteamericano contra Cuba.
Señaló, como una de esas complejidades imprevistas, la que ha representado la COVID-19, con daños sanitarios y económicos de alto impacto para el país.
El estudio de temas esenciales, como los referidos a la economía, la política de cuadros, el funcionamiento interno de la organización y la labor político-ideológica, permite enriquecer el criterio argumentativo, pues, al decir de Iyolexis Correa Lorenzo, delegada del ministerio del Turismo en Ciego de Ávila, «como representantes del pueblo y de la militancia comunista debemos estar bien preparados para participar activamente de cada arista que discuta el Congreso».
Aymara Altunaga Espinosa, secretaria general del comité del Partido en la Universidad de Ciencias Médicas de Ciego de Ávila, respaldó tal opinión, pues «la preparación constituye la mejor manera de lograr intercambios acertados y llegar a ideas y consensos durante la reunión de los militantes cubanos».
CONTINUIDAD EN LA JUVENTUD
La continuidad que significa el 8vo. Congreso, respecto a las ediciones precedentes, en su propósito de construir un socialismo cada vez más próspero y sostenible, tiene también una expresión en el rol que, en los debates del evento, tienen las nuevas generaciones, «las cuales también son protagonistas en el balance exhaustivo y en la evaluación profunda de estos documentos, claves para trazar pautas y líneas programáticas de cara al futuro que todos aspiramos», observó Garrrido Pérez.
En Granma, Dilberto González García, secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas en la provincia, es una de esas voces, quien aseveró que, como representante de los revolucionarios más bisoños a la cita partidista, resulta un alto honor y una expresión de la confianza en la capacidad de pensamiento y de acción de los jóvenes cubanos.
El joven Alberto Torres, primer secretario del Partido del municipio de San José de las Lajas, capital de la provincia de Mayabeque, puntualizó que participar en estos análisis entraña un compromiso grande, que asume desde los valores éticos y políticos que definen a la Revolución, guiado por los principios heredados de la dirección histórica.
Reafirmó que, aunque el escenario epidemiológico implique desafíos adicionales, como lo ha sido la hostilidad del imperialismo yanqui contra la nación, este Congreso refrendará la continuidad del proceso social cubano, para hacer irreversible el socialismo y avanzar en el mejoramiento de la calidad de vida de la población.
FORTALEZA POLÍTICA PARA UNA ECONOMÍA VIGOROSA
El análisis y examen de temas de la economía cubana durante el periodo comprendido entre 2016 y 2020, la evaluación integral del modelo de desarrollo del país, y la estrategia y el plan nacional de avance con vistas al año 2030, también estuvieron en la agenda de la primera jornada para la preparación, intercambio y esclarecimiento de los textos rectores.
Con 35 años en la actividad energética, y especialista en la Empresa de Perforación y Extracción de Petróleo de Occidente, la delegada mayabequense, ingeniera Gladys Esther Palazón Herrera, jefa de brigada de Investigaciones en la entidad, razonó que es medular el actual examen de la documentación, sobre todo lo referido a la Política Económica y Social del país, relacionada con las diversas medidas aplicadas para influir en el crecimiento y el avance en los diversos sectores estratégicos, como la energía.
Reconoció que esta preparación permite una mejor visión de las temáticas que se discutirán y analizarán con vistas a los años venideros. Enfatizó en que será una fortaleza para el sector energético, porque permitirá profundizar en lo que se ha avanzado y en lo que aún queda por hacer. Resaltó el papel creciente de la mujer en el sector, desde las labores sobre el pozo, hasta los niveles de dirección, para alcanzar, aportar y encadenar la producción de energía, en función de invertir la matriz energética y lograr los objetivos de desarrollo industrial con el crudo nacional.
Se detuvo en la trascendencia del Congreso para ahondar en las políticas de desarrollo de la matriz energética nacional, así como en el uso de las fuentes renovables, para disminuir la generación con combustibles fósiles, según las posibilidades del país.
Estimó que, desde esta preparación, apuntala sus valoraciones acerca del desarrollo perspectivo de esta esfera, y ello favorecerá posibles intervenciones y la toma de decisiones con vistas a los próximos años.
Sulema Guevara Aguilar, integrante de la delegación de Granma, y especialista en producción industrial azucarera del central Roberto Ramírez, del municipio de Niquero, expresó que, «como trabajadora de la industria azucarera, es una gran responsabilidad representar al gremio, pues este es un sector estratégico para Cuba, y que, a pesar de haber sido impactado negativamente, en los últimos años, por el bloqueo, está llamado a transformarse y a aportar mucho más a la economía nacional».
Precisó que, en estas sesiones de estudio, encaminadas a enriquecer el contenido de los documentos que van a regir las proyecciones de trabajo en los próximos cinco años, en función de garantizar la continuidad e irreversibilidad del proceso revolucionario cubano, «es vital la profundidad con la que se realicen los análisis, teniendo en cuenta que incidirán en la vida económica, política y social del país», subrayó.
Por su parte, la doctora en Ciencias Bárbara Rodríguez Sánchez, del Instituto de Ciencia Animal, en Mayabeque, subrayó la importancia de este intercambio previo, que favorece el acercamiento a todos los documentos, para un análisis profundo, que posibilite contar con mayores argumentos sobre el papel de la ciencia en las proyecciones del país.
Ponderó que es trascendental el rol de la ciencia en la dinámica social –y los desafíos de la pandemia lo han confirmado–, una participación que debe ser todavía mayor en la producción agropecuaria, acorde al Plan Nacional de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional, con impactos cada vez más visibles en el desarrollo local.
«En este sentido, será vital socializar las propuestas que impacten en la gestión articulada entre el gobierno y los científicos en pos de nuestro progreso», dijo Rodríguez Sánchez, quien se consideró privilegiada por haber sido electa delegada y representar a los trabajadores del Polo Científico de la provincia, creado a partir del pensamiento estratégico del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.