Los productores pinareños deberán plantar en la campaña de frio unas 1 340 hectáreas de la hortaliza con destino a la industria
Con la máxima de garantizar el tomate para consumo en la etapa de fin de año, la provincia cuenta con 70 hectáreas sembradas en los meses de agosto y septiembre, de las que se espera un rendimiento aproximado de 10 toneladas por cada una de ellas para el abastecimiento a la población.
Los productores pinareños deberán plantar además, en la campaña de frio, 1 340 hectáreas de la hortaliza con destino a la industria y otras 560 para vender como opción de ensalada fresca a las familias.
Los mayores volúmenes de plantación estarán concentrados en los municipios de Consolación del Sur, San Luis, Sandino, Los Palacios, San Juan y Martínez y Pinar del Río.
Benigno Morejón Gigato, especialista principal en hortalizas de la Delegación de la Agricultura, informó que ya están garantizados el abono químico y los recursos fitosanitarios para el tomate reservado a la industria y se espera el recibo del resto en los próximos días; aunque en aras de continuar ininterrumpidamente la siembra, los campesinos tomarán alternativas como el uso de biofertilizantes y materia orgánica proveniente de la gallinaza recolectada en unidades de la Empresa Avícola.
El funcionario agregó que el riego de los semilleros es prioridad en todas las estructuras productivas vinculadas a esta actividad en la presente campaña y que en respaldo a la del próximo año, la provincia cultivará 45 hectáreas para la obtención de semillas de diferentes variedades.
Por otra parte, Morejón Gigato afirmó que existen 34 hectáreas planificadas para la plantación por sistema de empalado, el cual eleva los rendimientos, mejora la situación fitosanitaria en los campos y alarga el tiempo de cosecha y que, con el fin de obtener buenos resultados productivos con la aplicación de esta técnica, los campesinos recibirán cursos de instrucción con especialistas de otros territorios del país.
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